¿Te has planteado alguna vez que el precio de los sujetadores de tallas grandes es más alto que el de tallas pequeñas? ¿Nos estarán estafando y se aprovechan los fabricantes de la falta de variedad de marcas?
En este artículo quiero resolver las dudas que hay referentes a los precios de los sujetadores de tallas grandes.
Un sujetador es una prenda técnica no es una prenda de moda
Este primer punto es importantísimo. Llevas el sujetador mínimo 12 horas diarias (eso si estás incómoda y te lo quitas en cuanto entras en casa, sino cerca de 18 horas) los siete días de la semana. La mayor parte de tu vida, la pasas con un sujetador puesto.
Para que el sujetador cumpla su misión, que no es ni más ni menos que la de sujetar, debe estar diseñado de tal manera que el peso se reparta correctamente a lo largo de todo el contorno.
Está estudiada la carga que soportará cada costura, el peso que aguantarán los tirantes, la profundidad que necesita la copa... Con lo que su diseño no es igual que el de cualquier otra prenda de ropa. Y, consecuentemente no se tarda lo mismo en diseñar y crear un nuevo modelo.
En la imagen anterior puedes ver todas las partes de un sujetador, cada una de ellas cumple una función y, para eso, tiene que estar muy bien diseñado y confeccionado. Por esta causa el precio del sujetador ya no puede ser tan bajo como el de cualquier otro textil.
El material con el que se confecciona
Un buen sujetador no puede ser confeccionado con cualquier material y un sujetador destinado a pechos grandes menos aún.
Hay dos razones que justifican esta afirmación:
1. Tiene que ser un material capaz de soportar un peso sin ceder rápidamente.
Sí, hay muchos sujetadores con materiales elásticos muy agradables al tacto que a la media hora de estrenarlos ya han cedido y seguro que tú tuviste la mala suerte de comprar al menos uno.
Si no queremos un sujetador de usar y tirar (por sostenibilidad y por nuestra economía) habrá que comprar marcas que elijan materiales de confección adecuados para que ese sujetador se convierta en una inversión y no en un gasto.
2. Tiene que ser un material respetuoso con la piel, puesto que va a estar en contacto con una de las partes más sensibles de nuestro cuerpo.
Es muy posible que haya materiales suficientemente rígidos para soportar el peso del pecho y más económicos, pero que dañen la piel de nuestro pecho y, sobre todo, del pezón.
Esos materiales tienen un coste y, lógicamente, se repercute en el precio de los sujetadores.
En tallas pequeñas hay sujetadores que se confeccionan con los mismos textiles que una camiseta o una blusa, por lo que el precio es muy inferior, pero también la capacidad de sujeción y el tiempo de vida.
En tallas grandes también hay marcas low cost que confeccionan algunas tallas de sujetadores. Cuando encuentras una te parece un verdadero chollo, pero cuando al mes ya no sujeta ni lo más mínimo, resulta una pérdida de dinero (y un atentado contra el planeta).
Esa falta de sujeción al mes se debe a que los materiales no tienen la calidad suficiente para soportar esos pesos y ceden. En cuanto se dan de sí, adios sujeción.
Por no hablar de que dos sujetadores de la misma talla y modelo tienen distinto tamaño porque el ahorro en la confección también se nota en el resultado final.
Por supuesto, también existen marcas de sujetadores para pechos pequeños que utilizan unos materiales fabulosos y su precio tampoco es reducido. Pero cuando nos queremos poner trágicas con eso de que nos cobran más por ser talla grande, no comparamos entre marcas de calidades similares, solo comparamos con las tiendas de Inditex.
Conclusión sobre el precio de los sujetadores
Creo que si juntamos investigación y desarrollo con calidad de materiales el precio de los sujetadores está más que justificado. Como a ti, a mí también me encantaría que costaran 15€, pero siendo realista, no es posible.
¿Estás de acuerdo conmigo o sigues pensando que no se justifica y se aprovechan de nosotras? Seguimos el debate en los comentarios.
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